En Reus, controlas a poderosos gigantes que te ayudan a moldear el planeta a tu voluntad, creando montañas, océanos, bosques y mucho más. Enriquécelo con plantas, minerales y vida animal. Sólo hay una cosa que no controlas: la humanidad, con todas sus virtudes y vicios. Puedes moldear su mundo, pero no su voluntad. Proporciónales lo necesario y podrán prosperar. Dales demasiado, y su avaricia se impondrá.